Por: Sergio Reyes
Unidad de Comunicaciones
UES San Miguel
En vez de la estructura, solo hay una inconclusa obra que no alcanzó ni el 7 % del proyecto que originalmente debía haberse finalizado en octubre de 2012 y que –según documentos en poder de las autoridades del FMO– se paralizó debido a la iliquidez de la empresa constructora y a la negativa de la compañía aseguradora, por hacer efectiva la fianza de la obra.
Cristóbal Ríos, decano de la FMO/UES, explicó que se corre el riesgo de perder los fondos que el Gobierno asignó para la construcción del edificio universitario, el cual asciende a más de $756,000, si a finales de año no se llega a un acuerdo con la empresa aseguradora y se asigna un nuevo proceso de licitación para que otra empresa se haga cargo de la obra.
“La aseguradora tenía sospechas que el contratista había hecho fraude y por eso entabla demanda contra los representantes legales de la constructora, eso desde mayo de 2012 y hasta la fecha han tenido suficiente tiempo para hacer la investigación y pagar la fianza”, dijo la autoridad universitaria.
Ríos explicó que a la empresa constructora, de nombre Edificaciones E.A.G. Obras Civiles, se le desembolsó un monto aproximado de $226,000, con lo cual debía hacer los cimientos del edificio de dos niveles. Sin embargo, un par de meses después de iniciar el proyecto, la compañía se declaró en bancarrota, por lo cual la aseguradora debía responder con el anticipo de garantía y fiel cumplimiento de la obra, que asciende a $378,000.
Tanto las autoridades de la universidad como los alumnos coinciden en la necesidad de que se construya el edificio, ya que hay secciones enteras que reciben clases en aulas que no son pedagógicamente adecuadas, ya que inicialmente fueron construidas para impartir talleres de arte, por lo que prácticamente están a la intemperie.
“En esta glorieta recibimos clases, pero al mediodía el calor es insoportable y cuando llueve y azota la lluvia nos mojamos”, dice Juan Carlos Rodríguez, estudiante de segundo año de la carrera de Arquitectura.
El decano agregó que aún tienen una opción para evitar que los fondos, que le fueron asignados a la Facultad Multidisciplinaria de Oriente, no sean retirados y reasignados. “El riesgo es que los fondos pasen a otro destino por lo que se está trabajando para judicializar el caso en contra de la aseguradora y así congelar o reservar ese dinero hasta que nos respondan”, dijo.