¿Como funciona la elección del Rector de la Universidad de El Salvador (UES – 2011)?

DIARIO DIGITAL LA PAGINA.COM.SV
POR JAIME ULISES MARINERO

Entre finales de este mes y principios de octubre se realizarán las elecciones para las máximas autoridades de la Universidad de El Salvador (UES) y de lo único que se tiene certeza es que la rectoría será presidida por un hombre, ya que ocho profesionales varones compiten por el cargo y ninguna mujer.

Por primera vez en los 170 años de existencia de la UES compiten ocho candidatos, que buscarán atraer los votos de más de 45 mil estudiantes y cerca de 3 mil docentes, así como cientos de profesionales no docentes.

El Reglamento Electoral de la Universidad de El Salvador manda a elegir rector y vicerrectores, así como otras autoridades universitarias, cada cuatro años y para ello manda a la conformación de tres organismos preelectorales por los sectores estudiantil, docente y profesional no docente.

Cada uno de los tres sectores tiene el 33.33 por ciento de incidencia en las elecciones, de tal manera que la Asamblea General Universitaria (AGU) conformada por 72 miembros elige a las nuevas autoridades con base a las propuestas independiente de los sectores.

Actualmente todos los aspirantes a rector y sus acompañantes a vicerrector se encuentran en franca campaña electoral la cual inició el 26 de agosto y concluye el 9 de septiembre.

Por el cargo de rector compiten Rufino Quezada, que busca la reelección; Benjamín López, quien ya desempeñó el cargo entre 1995 y 1999; Roberto Nieto Lovo, actual decano de la faculta de Ingeniería y Arquitectura; Eliseo Ortiz Ruiz, magistrado suplente de la Corte Suprema de Justicia; Ernesto Selva Sutter, investigador médico cuyo nombre sonó fuerte para ser ministro de Salud de la actual gestión presidencial; Ricardo Benavides, el único candidato independendiente y sun compañeros de fórmula para las dos vicerrectorías; Walter Rivas, jefe del departamenro de Ciencias Sociales de la Facultad de Economía; y Ennio Luna, docente de psicología que por segunda ocasión se inscribe en busca del cargo.

El resultado de las elecciones es respetado por la AGU: sin embargo puede darse el caso que las autoridades sean escogidas de diversas fórmulas; así el rector resulta de una propuesta y los rectores de otras, pues cada uno de ellos puede obtener diversas cantidades de votos, según Carlos Villalta, presidente de la AGU.

Una lucha de intereses

En las elecciones pasadas, cuando Rufino Quezada ganó las elecciones a su contrincante Joaquín Machuca, estaba claro que Quezada, un ingeniero agrónomo, tenía el apoyo incondicional de un ala fuerte dentro del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) que le dio su total respaldo. Ese apoyo fue suficiente para ganar en nueve de las doce facultades de la UES y en el sector docente, a quienes no les importó que Quezada fuera uno de los principales oponentes a la gestión de la ex rectora María Isabel Rodríguez o uno de los que siempre se opuso a la aprobación de los préstamos del BID que serían dirigidos a la UES.

No obstante ese apoyo hacia Quezada esta vez va dirigido hacia otro postulante. Se trata de Eliseo Ortiz Ruiz, actual magistrado suplente de la CSJ, quien tendría el beneplácito de las líneas academicistas dentro del FMLN. Ortiz, ex fiscal universitario ha sido propuesto por el movimiento Concertación Universitaria (CPU) y lleva como compañeros de fórmula a Roberto Díaz, docente de la multidisciplinaria de San Vicente y a Wilman Herrera, Director del Departamento de Educación de la Facultad de Humanidades, quienes optarán por las Vicerrectorías Administrativa y Académica, respectivamente.

Ortiz, como lo reconocen dirigentes del FMLN, es la figura sobre la cual se ha decantado el apoyo efemelenista y algunos grupos afines, tras considerarlo alguien que tendría la capacidad de generar el desarrollo académico, científico y cultural de la UES, pero además sería con quien mejor se entendería el gobierno central, lo anterior en vista de que Quezada ha perdido popularidad e influencia dentro de la comunidad universitaria.

No obstante Ortiz cuenta con la desventaja de que la mayoría de gremios al interior de la UES han abandonado sus apoyos a Quezada, pero se han mostrado parte del Movimiento de Integración de la Universidad de El Salvador, MIUES, que apuesta por Roberto Nieto, que lleva como aspirantes a las vicerrectorías a Salvador Castillo, decano de la Facultad de Química y Farmacia y para Vicerrectora Académica Ana María Glower, docente y ex decana de la Facultad de Ciencias y Humanidades.

Desde esa perspectiva Ortiz puede ganar las elecciones en el sector profesional no docente, pero Nieto podría imponerse en el sector estudiantil y en el de los docentes.

Empero, el favorito del sector profesionales no docente es Ernesto Selva Sutter, un médico investigador propuesto por el movimiento Iniciativa para la Transformación de la Universidad de El Salvador, ITUES, que lleva como acompañantes a Sergio Cañas y Reinaldo Carrillo.
Selva Sutter tampoco sería ajeno a los apoyos del FMLN, que lo consideran una carta potable y que sería su segunda apuesta en caso del que falle las intenciones de postular a Ortiz.

Un representante de la BRES, movimiento estudiantil caracterizado por su forma directa de protestar contra el gobierno y las mismas autoridades universitaria, aseguran que apoyan a Nieto, pero no les molestaría que Selva Sutter sea el elegido. “Lo que queremos es a alguien con visión, que no engañe a los universitarios como ha ocurrido con el actual rector, que logró nuestro apoyo y luego se olvidó del movimiento estudiantil”, dice el alumno.

Quien también cuenta con un apoyo, menor, dentro de las filas academicistas del FMLN, es Benjamín López Guillén, que apoyado por las FPL, una de las líneas que conformaron al referido partido, llegó a ser rector entre 1995 y 1999.

“Él hizo una buena gestión, pero ahora las cosas han cambiado y al FMLN le conviene alguien más con el temple de Eliseo Ortiz o con la trayectoria de Selva Sutter”, asegura un dirigente efemelenista, al sostener que su partido se mantendrá alejado de las elecciones sin dar ninguna línea respetando la autonomía universitaria.

López Guillén, propuesto por el movimiento UNETE es acompañado por Julio Ernesto Barahona y Manuel Antonio Mejía. El primero es el Vicedecano de la Facultad de Medicina, quien aspira a la Vicerrectoría Académica y el segundo es el Jefe de la Unidad Financiera Institucional, UFI, que optará por la Vicerrectoría Administrativa.

El ex rector tendría el apoyo de un buen porcentaje de docentes que recuerdan su gestión, pero no de los gremios estudiantiles, que renovados, prefieren a alguien que aporte nuevas proyecciones universitarias. Entre el sector profesional no docente conformado por los miembros de todos los colegios y asociaciones de profesionales que aceptaron el llamado a la elección, ocuparía el tercer lugar de afinidad, tras Ortiz y Sutter.

Rivas, propuesto por Movimiento de Transformación de la Universidad de El Salvador (MOTUES; Luna, la carta de Nuestra UES; y Benavides, independiente, tienen pocas probabilidad de triunfar y sus aspiraciones a rector se limitarían a participar. En elecciones Luna contó con cierto apoyo efemelensta, el mismo que ahora se decanta por otros.

Propuestas

Todos coinciden en la necesidad de transformar la universidad, de lograr más fondos del presupuesto, de impulsar la autonomía y de “democratizar” la máxima casa de estudios superiores del país.

Rufino Quezada señala que los motivos que lo impulsaron a buscar nuevamente el cargo son
retos y desafíos a los que se enfrenta el Alma Mater en la actualidad, tal es el caso de la lucha por un incremento al presupuesto universitario.

Asimismo, mencionó que de ser electo implementará el “Plan Cuatrienal de Desarrollo 2011-2015”, que tendrá por objetivo realizar una reforma académica para alcanzar una excelencia educativa que beneficie directamente a los estudiantes.
Por su parte Eliseo Ortiz, propone un cambio a la normativa interna de la UES para optimizar, agilizar y modernizarlos procesos de adquisiciones, ejecución de proyectos y atención a la población estudiantil, pues se eliminarían trámites burocráticos que retardan los procesos en la casa de estudios.

“En la universidad se han perdido muchos espacios requeridos para el desarrollo académico, científico, social y político; necesitamos espacios democráticos y que éstos sirvan para debatir y crear espacios de opinión que pongan nuevamente a la vanguardia a la Universidad El Salvador”,

Por su parte Bejamín López Guillén, propone la “la revitalización de la institución y la modernización del accionar acedémico en el alma máter”.

El resto de canditatos tiene planteamientos similares, por lo que a juicio de algunos miembros de asociaciones docentes, ganará aquel que cuente con más apoyo influenciado por grupos externos, especialmente afines al FMLN, partido que a través de sus diferentes corrientes ideológicas siempre tuvo relación con la rectoría desde tiempos del conflicto armado.

Será hasta después de las elecciones y la ratificación de la AGU, cuando se conozca si Rufino Quezada es reelecto o si la UES tendrá a su rector número 76. El primero fue el presbítero Crisanto Salazar en 1841-42, cuando no había intereses ajenos al alma mater.

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